OLORES DE SEVILLA

!Ay mi Virgen de la Palma! !Ay mi Hermandad del Buen Fin!. Casi veinte años ya caminando a tu espalda. Yendo detrás de tu manto el que cobija a los que amo y a los que quiero tanto. Cuando sales de tu casa la emoción me embarga. Suena la música y mis ojos rompen en lágrimas. Son lágrimas de amor de respeto y devoción. Yo no te veo la cara voy detrás de ti. Yo te miro y no te veo y te vuelvo a mirar. Tú vuelves tus ojos hacia mí. Tú me mandas un beso que recojo con fervor y embeleso. Otro año más te doy las gracias por poder contigo estar. Y así cumplir con mi estación penitencial. !Virgen de la Palma prometo seguir contigo!. Que mis peticiones se cumplan y poderte acompañar. Autora: María Antonia Moyano Oliveros (AMO) Todos los derechos a la autora.

!Madre mía! No me laves el pañuelo que viene lleno de sangre y sudor. Qué he llevado sobre mis hombros a la Virgen de la Palma a la Madre de Dios. Un costalero soy mis pies son los de la Virgen. Son los que hacen que Ella ande y se meza con amor. Que se mezclen con la gente con admiración y fervor. !Madre mía! no me laves el pañuelo. En él concentrado está todo mi esfuerzo y devoción. Autora: María Antonia Moyano Oliveros (AMO) Todos los derechos reservados a la autora.